Han pasado años en ciernes, pero la Isla de los Sueños de Moscú finalmente abrió la semana pasada como la respuesta de Rusia a Disneyland. Ostrov Mechty o Dream Island es un nuevo parque temático que se lanzó el sábado 29 de febrero en Moscú. Es el primer parque temático a gran escala de Rusia y el parque temático cubierto más grande de Europa con 300.000 metros cuadrados.
Tiene una estética Disneyland muy ligera con un castillo de cuento de hadas como la pieza central (el castillo de la Reina de las Nieves en lugar del de Cenicienta) pero no tiene ninguna conexión con el popular parque de atracciones. Según los arquitectos Chapman Taylor, el diseño se inspiró en los edificios góticos de Europa occidental, así como en la arquitectura histórica del Kremlin.
Al igual que Disney, alberga diferentes mundos (nueve en total) llenos de diversiones, atracciones y personajes de dibujos animados, incluyendo Teenage Mutant Ninja Turtles, los Pitufos, Hello Kitty, Hotel Transilvania y las adaptaciones rusas del Libro de la Selva y Pinocho.
En el parque, hay paseos temáticos diseñados para parecerse a diferentes ciudades con fachadas de edificios y escaparates inspiradas en la arquitectura de Londres, Roma, Los Angeles y Barcelona. En ‘Roma’ hay un mini Coliseo, en ‘Barcelona’ hay edificios de estilo Gaudí y en Londres los visitantes pueden posar junto a cajas telefónicas rojas y guardias reales.
Según Reuters, la cúpula principal de cristal que cubre el parque es varias veces más grande que la cúpula de las Galerías Lafayette en París y más del doble del tamaño de la que cubre el Reichstag alemán en Berlín. Con todo lo que tiene lugar en el interior, la gente no tiene que preocuparse por los largos y fríos inviernos de Moscú o los veranos sofocantes.
El parque de diversiones es el hogar de más de 15 cafés, restaurantes y camiones de comida, así como tiendas y boutiques que venden de todo, desde recuerdos hasta artículos para el hogar y ropa. Hay planes para introducir un cine, noria y una sala de conciertos pronto con la segunda fase del parque, así como un hotel de cuatro estrellas y zonas para picnics, deportes y actividades familiares.
El New York Times informa que el parque espera 7,5 millones de visitantes al año, con 2,5 millones de esos visitantes siendo turistas extranjeros. Los boletos de fin de semana para una familia de cuatro cuestan alrededor de 163 dolares.
