A partir de enero de 2020, Amsterdam cobrará una tarifa fija de 3 libras esterlinas (3,25 USD) por persona, por noche a cualquier visitante que pase la noche en un hotel, además de la tarifa actual del 7%. Los turistas que se alojen en alquileres de Airbnb también pagarán un aumento del alquiler del 10% por noche.
El impuesto fijo en los campings será de 1 EUR (alrededor de 1,10 USD) por persona y noche. “Probablemente será el impuesto nocturno más alto de Amsterdam en Europa, en promedio”, dijo Tim Fairhurst, director de política de la Asociación Europea de Turismo, a CNN. La tarifa plana se aplicaría sobre el impuesto turístico actual del 7%.
Muchos países europeos añaden un impuesto turístico a la factura del hotel. Y hay muchas maneras de calcularlo, dependiendo de dónde lo visites. En París, por ejemplo, los turistas pueden esperar que se les cobre cualquier cosa, desde 20 centavos hasta 1,50 libras esterlinas (1,64 dólares) por persona y noche, según la ubicación del hotel y la clasificación por estrellas.
Objetivos del impuesto
En Roma, se aplica una tarifa plana. Así que puedes pagar hasta 7 euros por persona y noche, lo que resulta en más de 80 libras esterlinas (87 usd) para dos personas si te quedas una semana. En Amsterdam, con la nueva tarifa fija aplicada al impuesto turístico, una pareja que se aloje en un hotel de 120 libras por noche durante una semana pagaría 117,60 euros (128,30 dólares) extra (en total) de 2020, un gravamen bastante significativo.
Vera Al, portavoz del vicealcalde de la ciudad, Groot Wassink, dijo a CNN: “El hecho es que los números están creciendo – no se puede construir una valla alrededor de la ciudad y tampoco queremos eso. Aumentar el impuesto no debe afectar el número de visitantes, pero es el principio. Cuesta mucho mantener nuestra ciudad limpia y segura, y nuestra infraestructura – como puentes – en un buen estado.
Menos de un millón de personas viven en Amsterdam, pero recibe alrededor de 20 millones de visitantes al año. A medida que el turismo de masas amenaza con abrumar a la ciudad, Amsterdam ha prohibido los alquileres a corto plazo de Airbnb en zonas concurridas e introducido una prohibición de cualquier nueva tienda dirigida a los turistas (particularmente aquellos que venden recuerdos caros) en el centro histórico. También reprimió los disruptivos recorridos por el centro de la ciudad, como Segways, bicicletas de cerveza y excursiones en barco, así como recorridos por el distrito de luz roja.
