Las calles y plazas de Venecia están desiertas debido al brote de coronavirus y la situación es motivo de gran preocupación para la administración de la ciudad. Tanto que han decidido posponer la introducción de la cuota de entrada a la ciudad.
El otoño pasado, las autoridades venecianas anunciaron la introducción de un “billete de entrada” para todos los turistas que quisieran visitar a la Reina del Adriático, con precios que van desde los 3 euros en temporada baja hasta los 10 euros en temporada alta.
Pero ahora que la ciudad está pasando por su peor crisis turística de los últimos sesenta años, el alcalde de Venecia ha decidido posponer la introducción de la tasa hasta el 1 de julio de 2021.
El alcalde Luigi Brugnaro dijo que la aplicación de la cuota de inscripción en este momento sería “inoportuna”. Sin embargo, también dijo que la administración todavía tiene la intención de traer “un tipo diferente de turismo a Venecia”, y ayudar a la ciudad con sus problemas de hacinamiento.
Brugnaro y sus miembros del consejo han estimado que pasará un año antes de que se acabe totalmente el nivel de bloqueo de este cierre de cuarentena por el coronavirus, pero están seguros de que el turismo volverá a empezar lo antes posible, porque “Venecia es Venecia”, y como ciudad turística necesita confiar en que todo volverá a como era antes.
