Muchos países como Japón y Tailandia están sufriendo los efectos del coronavirus en el turismo. Hay un creciente “miedo a los viajes”, especialmente en lugares donde hay un caso reportado del COVID-19. La secretaria de turismo de Filipinas, Bernadette Romulo-Puyat quiere asegurar a los turistas internacionales que “es seguro venir a Filipinas”.
También se jactó de que “no hay transmisión local en el país y todos los puntos de venta turístico están listos”. Con el fin de atraer a más viajeros extranjeros, el Departamento de Turismo planea intensificar esfuerzos de comercialización a países sin una prohibición de viaje impuesta como Corea del Sur, Estados Unidos y Japón. Además, con los recientes premios recibidos por varios destinos filipinos, planea aprovechar otras nacionalidades que puedan estar interesadas en Filipinas.
Además de fortalecer el turismo internacional, parece que tiene otra carta en la manga, que está impulsando el turismo interno. Romulo-Puyat afirmó que el departamento de turismo junto con las aerolíneas locales (Philippine Airlines, Cebu Pacific y AirAsia Philippines), la Asociación de Propietarios de Hoteles de Filipinas y el Congreso de Turismo de Filipinas se reunieron con el Presidente filipino y se comprometieron a reducir las tarifas para alentar a los filipinos a viajar localmente.
Con las aerolíneas acordaron reducir el 50% de la tarifa publicada de sus tarifas aéreas. Por ejemplo, un vuelo de ida y vuelta a Ilo-ilo será de 1.000 PHP (20 USD). Los viajeros extranjeros también se beneficiarán de estas tarifas con descuento cuando viajen a otras partes de Filipinas desde Manila.
Romulo-Puyat dijo entonces que la reunión fue bien con el presidente, que quiere viajar en diferentes partes del país para demostrar que es seguro ir a estos lugares de Filipinas, sin dudas un acto que será tomado bien por los potenciales futuros turistas.