Helsinki es la ciudad más grande y capital de Finlandia. Se encuentra en la región de Uusimaa, que se ubica en el sur del país. Con una población de 629.512 habitantes en su zona central, una urbana de 1.231.595 personas y una metropolitana de más de 1,4 millones, la ciudad es el municipio más poblado de Finlandia.
Esta hermosa ciudad cubre una impresionante superficie total de 715,48 kilómetros cuadrados (276,25 millas cuadradas). Esta área, combinada con la población total estimada, eleva a la ciudad de Helsinki a una densidad de población de 3.034,62 individuos que viven por kilómetro cuadrado, la cual es con diferencia la más alta a nivel nacional.
Demografía de la ciudad
La ciudad tiene una mayor proporción de mujeres (53,4%) que en cualquier otro lugar del país. Sin embargo, la esperanza de vida tanto para hombres como para mujeres está por debajo de la media nacional, aunque sólo ligeramente. En promedio, los hombres viven solo unos 75,1 años, mientras que las mujeres unos 81,7 años.
Las lenguas oficiales de Helsinki son el finlandés y el sueco, con la mayoría de la población (81,9%) hablando finlandés como su lengua materna. El 5,9% de los que viven en la ciudad hablan sueco, y el 12,2% habla un idioma nativo que no es ni finlandés ni sueco. Hoy en día, el argot de Helsinki combina principalmente influencias de finlandés e inglés, pero tradicionalmente tenía fuertes influencias rusas y suecas. No fue hasta 1890 que los finlandeses superaron a los hablantes suecos como la mayoría de la población de la ciudad.
La ciudad tiene el mayor número de inmigrantes en Finlandia, con hasta 140 nacionalidades representadas en la ciudad. El grupo más grande es el de Suecia, seguido de Rusia, Estonia, China, Somalia, Kurdistán, Alemania, España, Vietnam, Francia y Turquía. Siendo que en la antigüedad ya era el hogar de muchas nacionalidades diferentes, hoy en día, los ciudadanos extranjeros representan nada menos que el 8% de la población.
Crecimiento de la población
Helsinki ha proliferado desde la década de 1810, que fue cuando reemplazó a Turku como la capital del Gran Ducado de Finlandia. Esto más tarde se convirtió en la República soberana de Finlandia. El crecimiento continuó a lo largo de los años, desacelerándose sólo durante el período de la Guerra Civil finlandesa.
Después de la Segunda Guerra Mundial, la gente comenzó a abandonar el campo y acudir a las ciudades de Finlandia, incluyendo la ciudad de Helsinki. La población de la ciudad saltó de 275.000 a 525.600 entre 1944 y 1969. Una falta de vivienda resultante hizo que la gente comenzara a salir de la ciudad en la década de 1960, trasladándose a las cercanas ciudades de Espoo y Vantaa, donde el crecimiento de la población se ha disparado bastante más desde entonces.
La creciente falta de vivienda junto con los altos costos de vida en la región central de Helsinki significa que muchos viajeros diarios se han visto obligados a encontrar alojamiento en alguna zonas rurales cercanas, e incluso más lejos de ciudades como Lohja, Hemeenlinna y Lahti, para así poder mantener su trabajo y familia.
