El brote de coronavirus golpeó duramente a la industria del entretenimiento, causando enormes pérdidas para las empresas que operan en esta rama. Sin embargo, a medida que millones de personas comenzaron a pasar más tiempo en sus casas y en línea, los últimos meses han sido testigos de un aumento fuerte en los videojuegos.
Según los datos recopilados, del 16 al 22 de marzo, las ventas mundiales de videojuegos aumentaron más del 60 por ciento, con un total de 4,3 millones de juegos vendidos en todo el mundo. Al mismo tiempo, al igual que para las ventas de juegos similares aumentó en un 44 por ciento a nivel mundial.
Con un salto del 82 por ciento en las ventas semana tras semana, los juegos físicos se clasificaron como el segundo tipo de videojuego más buscado en marzo. Entre el 16 y el 22 de marzo se vendieron casi 1,6 millones de títulos en todo el mundo. Este aumento se debió en parte al lanzamiento de los nuevos títulos como Animal Crossing: New Horizons y DOOM: Eternal.
Sin embargo, incluso sin los últimos títulos, las ventas de juegos físicos siguieron aumentando un 10,8 por ciento en comparación con la semana anterior. Otras estadísticas muestran que los juegos digitales registraron un aumento del 52,9 por ciento en las ventas semanales en marzo, con más de 2,7 millones de juegos descargados en 50 mercados.
Mercado mundial de videojuegos
Además, las cifras revelaron que los juegos digitales globales alcanzaron los 10.000 millones de dólares en marzo, el mayor beneficio mensual de la historia. Los datos también mostraron a los jugadores de todo el mundo están pasando más tiempo en juegos durante la cuarentena del coronavirus. Con un aumento del 45 por ciento en el tiempo dedicado a los videojuegos en marzo, estados Unidos se clasificó como el país líder a nivel mundial.
Una encuesta reciente, realizada en los Estados Unidos en abril, mostró que uno de cada cinco encuestados espera gastar más en juegos debido al brote de coronavirus. Los jugadores franceses ocuparon el segundo lugar con un aumento del 38 por ciento en el tiempo dedicado a jugar videojuegos, algo no planificado para estas épocas de verano.
