Deténgase y reflexione: ¿en qué momentos se siente más cansado? No será una sorpresa si descubres que justo antes de que la somnolencia comenzará, comiste algo. La realidad es que esa suavidad sin sentido puede tener una causa muy simple: su hábito de comer.
Según una encuesta de Ibope, el 98% de los brasileños tienen algún nivel de cansancio y una de las causas es la alimentación desequilibrada. Conozca la relación entre lo que come (o no come) y su estado de agotamiento:
Exceso de alimentos en las comidas
Después de exagerar en el almuerzo o la cena la persona tiende a tener sueño y se siente cansada. Esto ocurre porque después de una comida voluminosa el cuerpo se ve obligado a trabajar más duro para la digestión.
Con esto, el flujo de sangre se dirige al estómago y al intestino. Como consecuencia, la circulación en el cerebro se ve comprometida, por lo que la sensación de fatiga.
Dietas restrictivas
Las dietas que reducen los carbohidratos pueden causar fatiga, especialmente en los primeros días, ya que son nuestra principal fuente de energía. La tendencia es que el cuerpo se acostumbre a este cambio con el tiempo obteniendo combustible de otras fuentes, pero las personas que practican actividades físicas necesitan más glucosa durante el día y pueden sentirse más exhaustas por su escasez.
El secreto es comer un poco de todo: frutas, verduras, granos enteros, grasas buenas, carnes magras, huevos, leche y productos lácteos. Preferiblemente un menú variado, colorido y diferente para cada día de la semana.
Falta de nutrientes
Tal vez haya escuchado que debemos consumir una variedad de vitaminas y minerales que están presentes principalmente en las frutas, verduras y legumbres. Porque esa afirmación es cierta.
Sin embargo, es sólo cuando tales nutrientes faltan en el cuerpo que las personas suelen darse cuenta de la carencia que hacen, valorando el consumo de mejores alimentos.
La ausencia o el desequilibrio de estos elementos puede causar daños a la salud, porque el cuerpo necesita estos micronutrientes. Cuando no se consumen, los riesgos pueden ser grandes, lo que lleva a la aparición de varias enfermedades como la anemia, por ejemplo.
Exagerar en la grasa
La grasa toma tiempo para ser digerida y requiere un trabajo corporal más intenso. Antes de irse a dormir, puede interferir con el sueño y provocar fatiga al día siguiente.
Tomar poca agua
El simple hábito de mantener el cuerpo hidratado ya alivia los síntomas del cansancio. El agua potable evita la reducción del volumen de la sangre, obstaculizando su bombeo, lo que consecuentemente boicotea su energía.
Falta de hierro
No comer alimentos ricos en hierro puede causar fatiga, lentitud y distracción de la concentración. La deficiencia de minerales todavía causa irritación y aumenta el riesgo de anemia. Se ingiere a través de alimentos como la carne, las legumbres y las verduras de color verde oscuro.
Pero cuidado: no todo es culpa de la comida. El cansancio relacionado con la comida es una sensación discreta, el cansancio constante requiere atención médica. Como varias enfermedades se manifiestan primero en forma de cansancio extremo, busque orientación profesional si se siente que realmente esta sensación esta atormentandolo durante todo el día.